Variscita en las pizarras escritas (Silúrico, Sierra de Aracena)
Se acerca uno a una minita antigua de la sierra de Aracena, supuestamente de mineral de cobre. Y encuentra una roca blanquecina con partes negras y venillas de esta cosa verde:
Con ese color, de entrada uno piensa en malaquita. Es la cosa verde claro más frecuente, es un mineral de cobre, y al fin y al cabo se supone que esta mina es de cobre. Pero el color no cuadra del todo, ni la textura... Piensa uno en segundo lugar en crisocola, otro mineral de cobre. Tiene una pinta más afín, pero tampoco acaba de encajar. Además, en el entorno faltan los diversos minerales que suelen acompañar en los yacimientos de cobre. Y la roca concreta en la que está no parece muy propicia... Al final, le pregunta uno a un geólogo local (Ignacio Garzón) y te lo soluciona: es variscita. No contiene cobre, pero puede confundirse con minerales de cobre.
La variscita es un fosfato de aluminio. Es escasa y bonita. Solo se ha usado para hacer adornos personales, joyas y cosas así. Se usó sobre todo en la prehistoria reciente y en época romana, en menor medida en épocas posteriores.
En la Península, la variscita aparece en unos pocos lugares: Gavá (Barcelona), varios puntos en el noroeste peninsular (Zamora, Pontevedra, León, norte de Portugal), y la Sierra de Aracena (sobre todo Pico Centeno, en Encinasola). En tres de esos lugares, hubo minería prehistórica. En todos los yacimientos, la variscita aparece, ya sea como nodulitos o como venillas, dentro de pizarras y liditas negras del periodo Silúrico. En nuestro caso se trata de venas dentro de pizarras. Las pizarras están muy deformadas y alteradas, pero se conservan retazos negros con fósiles de graptolitos que aseguran que se trata de pizarras silúricas:
La única labor minera visible es una trinchera estrecha en una ladera. Probablemente se continuaría en un socavón, aunque eso no puede apreciarse hoy. Las trincheras son frecuentes en las minas prehistóricas peninsulares de variscita, pero esta no tenía pinta de ser tan antigua. Cabe la posibilidad de que fuera una pequeña labor minera de investigación en busca de mineral de cobre, al tomar erróneamente a la variscita (que se ve directamente en el suelo de los alrededores) como un indicio superficial de la presencia de un filón de cobre en profundidad.
Curiosamente, la variscita toma el nombre de una antigua zona de Alemania, al igual que la orogenia Varisca, que es la que, en el Devónico o el Carbonífero, deformó estos materiales del Silúrico, abrió las grietas, y las rellenó con variscita, mediante fluidos hidrotermales que recogieron y concentraron los fosfatos contenidos en otros puntos de la piedra.